El mundo del espectáculo argentino se encuentra de luto por la partida de Antonio Gasalla, un referente del humor nacional que falleció este martes a los 84 años. El reconocido actor y comediante, conocido por sus personajes icónicos como “Mamá Cora”, “Flora” y “Yolanda”, dejó un legado imborrable en la memoria del público.
Gasalla había estado luchando contra la demencia senil, una enfermedad neurodegenerativa que lo había afectado durante años. En los últimos meses, su salud se había deteriorado y se encontraba internado en el Sanatorio Otamendi de la ciudad de Buenos Aires por una infección grave en los pulmones. Aunque había recibido el alta médica hace diez días, su estado de salud no mejoró.
Su hermano Carlos Gasalla, quien lo acompañó hasta el final, había confirmado el diagnóstico de demencia senil con palabras que aún resuenan: “Antonio no tiene conocimiento ninguno, no habla”. El periodista Marcelo Polino, amigo y confidente de Gasalla, había descrito con tristeza la situación del humorista: “Antonio está bastante complicado. No camina, no nos reconoce desde hace más de un año. Ya casi no habla, se alimenta por un botón gástrico. Es un panorama muy triste”.
La noticia de su fallecimiento fue confirmada por el productor teatral Carlos Rottemberg a través de sus redes sociales. El mundo del espectáculo se une al dolor de su familia y amigos, recordando la brillante trayectoria de un artista que supo conquistar al público con su talento y su humor único.
Un legado imborrable
Antonio Gasalla fue un maestro del humor, capaz de crear personajes inolvidables que marcaron a varias generaciones. Su talento y su carisma lo convirtieron en uno de los artistas más queridos y respetados de Argentina. Su trabajo ha sido reconocido con numerosos premios, entre ellos el Martín Fierro de Oro.
Su partida deja un vacío enorme en el mundo del espectáculo, pero su legado perdurará en la memoria de quienes lo admiraron y disfrutaron de su humor. ¡Hasta siempre, Antonio Gasalla!
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